Desde tiempos inmemoriales, la Brujería ha estado ligada a la figura de Satán. Probablemente, esto se deba a la multitud de leyendas que crecieron en torno a la imagen de las brujas. A las historias populares que se contaban sobre ellas, relacionándolas con los poderes malignos, debido a que estas damas de la noche eran fieles amantes de la luna y del negror de la oscuridad.
Pero las brujas, en Galicia conocidas como “meigas”, a quien adoraban y veneraban realmente era a la Madre Tierra o Madre Naturaleza. De ahi su origen celta y pagano.
Poseían el más poderoso conocimiento de todo tipo de hierbas curativas y alucinógenas, incluso llegaban a controlar la natalidad a través de estas mezclas naturales, siempre, actuando lo antes posible. Pioneras pues en la práctica del aborto.
La figura de la bruja o hechicera, también se dio en otras culturas antiguas como en la griega, la germánica y la hebrea. Este paganismo, llevó al arte de la brujería a pagar cara su existencia entre los habitantes de las primitivas sociedades religiosas del cristianismo. Su persecución y martirio viene de lejos, ya que no sólo se dio en los tiempos de la Inquisición.
En documentos anteriores al siglo VIII, ya se condenaba la brujería. Incluso Carlos I el Grande, el conocido Carlomagno ordenaba la pena de muerte a todas aquellas personas acusadas de provocar las tempestades que destrozaban las cosechas en el campo. Condenaba firmemente a todos los hechiceros, tanto fueran hombres como mujeres, capaces de invocar conjuros para contagiar males y enfermedades a sus semejantes. O simplemente ejecutaba a todo aquel que osara practicar cualquier tipo de arte considerada mágica y oscura.
Otros documentos, prohibían y condenaban el mero hecho de creer en la Brujería. A los sacerdotes se les encomendaba la labor de velar por sus feligreses para que éstos no cayeran en la tentación de Lucifer, al que creían causante principal de todos los fenómenos inexplicables relacionados con la magia.
Alquimistas, hechiceras, adivinas... Estas mujeres y en menor medida hombres, eran capaces de elaborar toda clase de recetas sanadoras o pócimas secretas, ungüentos, venenos y alucinógenos compuestos a base de plantas.
En Galicia, por ejemplo, las brujas se solían reunir siempre por las noches en días señalados y en fechas clave del calendario. Como la noche que va del 23 al 24 de Junio, conocida como la “Noche de San Juan” en la que se celebra la llegada del solsticio de verano en el hemisferio norte. La que va del 30 de Abril al 1 de Mayo, “la noche de Walpurgis” o “Noche de Brujas” festividad de tradición vikinga, que fue difundida sobre todo por la comunidad Celta. Y como no, la noche del Samhain que va del 31 de octubre al 1 de noviembre. Esta es la fiesta por excelencia, el “Año Nuevo Celta” que marcaba el final de la cosecha, la despedida del verano dando paso a la estación oscura. Los celtas creían que en la víspera del Samhain, el límite entre el mundo de los vivos y el de los muertos era poco claro. Y las brujas y los espíritus del Más Allá, volvían a la tierra la noche del 31 de octubre.
Cuando en estas fechas, las meigas se juntaban, lo hacían cerca de la ribera de un río, a la orilla del mar o entorno a una fuente de agua. Para conjurar espíritus de maldad, eran necesarios los cuatro elementos... Tierra, aire, fuego y agua...
Por otra parte, los aquelarres (palabra derivada del euskera akelarre, "aker" = macho cabrío; "larre" = campo), también conocidos como “Sabbats”, estaban más vinculados hacia la Edad Media. Éstos, eran los lugares donde las brujas se reunían y celebraban sus fiestas secretas, una especie de orgías en las que se decía que mantenían relaciones sexuales carnales con el mismísimo Diablo. Normalmente lo solían hacer en cuevas o en el claro de un bosque lo más apartado y recóndito posible.
En España tenemos como ejemplo las Cuevas de Zugarramurdi en Navarra. Situadas al Norte de la provincia, en la frontera con Francia, en las cuales se celebraban demoniacos aquelarres en los que se hablaba de supuestos sacrificios a bebés realizados por las brujas que después se los comían. El caso es que en Zugarramurdi, 12 mujeres fueron quemadas, acusadas de brujería en el año 1612...
Y estas reuniones, a su vez, derivaban de los ritos femeninos griegos y romanos. Y también de otros de origen tracio. Es por esto que las brujas del siglo XV podrían ser las herederas de las sacerdotisas bacantes, las adoradoras de Baco, dios del vino, inspirador de la locura ritual y el éxtasis. En la época de la Antigua Grecia el culto a esta divinidad, fue muy importante e incluso influyó demasiado en el pensamiento filosófico de los griegos.
Estas sacerdotisas, durante días y sin contacto con hombres, solían reunirse en un solitario monte para dar pie al mayor de los desemfrenos de alcohol, drogas y total misticismo. Las madres que tuvieran hijos pequeños no podían participar en estos actos momentáneamente. En sus rituales despedazaban animales vivos para comerlos y se pasaban noches enteras bailando completamente desnudas y en éxtasis. Al parecer, esto fomentaba la fertilidad. Hay una leyenda que cuenta que estas mujeres, recorrían los bosques insinuándose y dañando a los hombres que se iban encontrando por los caminos.
En el año 1484, el Papa Inoccencio VIII promulga una bula llamada “Summis Desiderantes” una declaración de guerra abierta contra las brujas, asesinas de bebés y adoradoras del Demonio.
Pues si que viene de viejo esto de las brujas. Estoy deseando leer la segunda parte :)
ResponderEliminarLa segunda parte mañana :) aunque tal vez sea un poco desagradable...
ResponderEliminarMuaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaac!!!
Gran post y muy interesante.se tendria que emplear mejor la palabra bruja hoy en dia por cierto!
ResponderEliminaratento al segundo episodio!
un saludo
Siempre me he llevado bien con las brujas, con las que se sienten unidas a la naturaleza. Eran y son personas que fluyen con la energía del universo y solo desean hacer el bien. También hay otra clase de brujas, como entre los seres humanos corrientes, gente buena y gente mala.
ResponderEliminarPero, sí, brujas y sacerdotisas tienen un lugar importante en la historia de la humanidad. Y en la mía.
Un beso.
mira brujas ha habido toda la vida y las habra jajajaaj
ResponderEliminarsaluditos ;)
Duke, claro que las ha habido y las habrá siempre... yo soy una jaajajajajaj!!!
ResponderEliminarMuchas gracias a todos por comentar chicos :)
ResponderEliminarBesos