martes, 17 de septiembre de 2013

✪ Annabelle, la muñeca maldita ✪


Se dice que algunos objetos guardan su propia energía y que cuando alguien los toca, esta energía y la de la persona se mezclan para atraer a los espíritus malignos... 

En 1970 una joven universitaria, Donna, recibió un misterioso regalo por su 28 cumpleaños, se trataba de una vieja muñeca de trapo que su madre le había comprado en una tienda especializada en muñecos de colección. La joven estudiaba enfermería y vivía en un apartamento compartido.

A Donna le encantó la muñeca que le había regalado su querida madre e inmediatamente la colocó sobre su cama a modo de decoración. Pero a los pocos días, Donna y Angie, su compañera de piso, empezaron a notar cosas extrañas en la muñeca, algo raro y misterioso que las aterraba, parecía moverse sola. Siempre que las dos estudiantes llegaban a casa, la muñeca aparecía en un lugar diferente a donde la habían dejado, con las piernas y los brazos cruzados o en posición vertical, de pie. 

Muy asustadas, Donna y Angie, se pusieron en contacto con una medium. La psíquica les reveló que el espíritu de una niña de siete años llamada Annabelle y que había muerto muchos años atrás en el mismo lugar donde se ubicaba su apartamento, habitaba en el interior de su muñeca. 

Conmovidas por la historia de la pequeña Annabelle, comenzaron a tratar a la muñeca como si de un humano se tratase, pero un amigo de Donna, Lou, se negaba a creer que la muñeca de trapo estuviera poseída por el espíritu de una dulce e inocente niña. Desde un principio a Lou nunca le había gustado aquella muñeca, presentía su maldad.  

Una tarde, casi al anochecer, Lou estaba echando una siesta en el sofá del apartamento de Donna cuando tuvo una terrorífica pesadilla: Annabelle trepaba y subía por su pierna hasta llegar a su cuello e intentar estrangularle. El chico se despertó sobresaltado y sofocado tratando de respirar, con marcas de rasguños sobre su pecho. 

Desesperados por deshacerse del espíritu maligno que había poseído a la muñeca, Donna, Angie y Lou se pusieron en contacto con los expertos Ed y Lorraine Warren, un matrimonio de investigadores de fenómenos paranormales y dueños del Museo Oculto Warren. 

Ed (7 de septiembre de 1926 - 23 de agosto de 2006) fue un notable demonólogo, autor y escritor y su mujer Lorraine (31 de enero de 1927 - ) es clarividente profesional y médium, trabajaba junto a su marido.
Los Warren creían que el espíritu que habitaba en la muñeca de Donna no era el de una niña muerta, sino el de un demonio. Lorraine no quería tocar a Annabelle, ni tampoco acercarse a ella, pero Ed decidió enfrentarse a la muñeca y llevarla al museo.

De camino al museo, los Warren tuvieron que parar. Ed se bajó del coche y roció a la muñeca de trapo con agua bendita, durante el trayecto habían estado a punto de  tener un grave accidente. Después de aquello llegaron sin problema hasta el museo, donde finalmente depositaron la muñeca en una urna sellada.

La maldición parecía haber desaparecido hasta que unos años más tarde un joven escéptico, que visitaba el Museo Oculto Warren, retó a la muñeca a demostrar sus poderes malignos.—Es un montón de mentiras, no me creo nada, si puedes arañar a alguien hazme algo a mí. — Ed Warren le escuchó fanfarronear y se molestó.—Lo siento mucho, joven, pero tiene que irse.—le dijo. Tres horas más tarde aquel visitante escéptico y fanfarrón falleció en el acto en un accidente, su moto se estrelló contra el tronco de un árbol...
El caso de la muñeca Annabelle fue uno de los más relevantes investigados por el matrimonio de parapsicólogos Ed y Lorraine Warren, en la actualidad se puede visitar a Annabelle, una Raggedy Ann, en el Museo Oculto Warren en Connecticut (EE.UU.) 
 Raggedy Ann es un personaje de ficción creado por el escritor norteamericano Johnny Gruelle (1880-1938) en una serie de libros para niños que escribió e ilustró.


lunes, 2 de septiembre de 2013

✪ La leyenda de las brujas de Zugarramurdi ✪


Zugarramurdi es una población situada al noroeste de Navarra, cerca de la frontera con Francia, un enclave mágico y natural marcado por las leyendas sobre brujas y aquelarres.

La palabra aquelarre proviene del vascuence. "Aker" significa macho cabrío y "larre"prado. Prado del macho cabrío. 

Las cuevas de Zugarramurdi (Sorginen Leizea) se encuentran a menos de medio kilómetro de distancia del pueblo. Hasta el siglo XVII este misterioso lugar dio cobijo a brujos y brujas que se reunían para celebrar aquelarres o sabbats: reuniones paganas, danzas alrededor de una hoguera, festines, sacrificios u orgías en noches de luna llena.


En 1608 una joven de Zugarramurdi,  María de Ximildegui, regresó al pueblo después de haber pasado una temporada en Francia. María reveló a sus vecinos que allí se convertía en bruja y volaba con la ayuda del diablo, les contó sus sueños, visiones y afirmó haber participado en aquelarres junto a otros habitantes del pueblo. El rumor de su testimonio llegó a oídos del tribunal de la Inquisición de Logroño y los sueños de la joven se tornaron pesadillas. 

Cincuenta y tres personas de la comarca fueron encausadas por el Santo Oficio, muchos fueron muriendo por el camino y otros en las celdas. El 7 de noviembre del año 1610 se celebró un Auto de fe que impactó a toda Europa, en el cual se perdonó a veintiuna de las personas arrestadas y se condenó a once a la hoguera. Zugarramurdi se convirtió en "el pueblo de las brujas"

También existe una leyenda que dice: 

Había una vez dos hermanos huérfanos: el pequeño era sencillo y humilde, el mayor duro y audaz. Un día neblinoso de otoño se perdieron al anochecer. El menor, cansado, le propuso a su hermano descansar junto a un peñasco, pero éste rechazó la propuesta y le abandonó para seguir la marcha. Al verse solo, el pequeño sintió miedo, se encomendó a Dios y se escondió dentro del tronco de un árbol que yacía sobre la hierba en el centro de una pradera. A media noche, los gritos de una multitud de brujas que aguardaban la llegada del demonio le despertaron. El diablo apareció transformado en la figura del macho cabrío y las brujas comenzaron a relatar todas sus fechorías. El niño, que se ocultaba en el interior del tronco del árbol, descubrió que una de las mujeres allí presentes era la causa de la enfermedad de la única hija de un duque y que su muerte era inminente. Una vez se marcharon todas la brujas, el niño tomó el camino con dirección a la casa del duque para contarle lo sucedido. La niña se curó y se convirtió en una hermosa joven que agradecida contrajo matrimonio con su salvador.  
Cuando el hermano mayor conoció la historia del pequeño sintió envidia y una noche decidió adentrarse en el monte para buscar la pradera de las brujas. Cuando la encontró se subió al tronco y aguardó la llegada de la noche, quería descubrir otro secreto que le proporcionase fortuna como a su hermano. Pero cuando llegó el demonio mandó a las brujas registrar el árbol y éstas le sorprendieron escondido en el, le atraparon y le tiraron por un barranco.